03/12/2018 10:00 Silvana F Todo me resultó excelente. Me compenetré con la obra y viví todas sus secuencias como si fuera parte de ella.
03/12/2018 09:55 Rodrigo C Una obra que refleja a través de la conjunción de imágenes y texto las diferencias de clase entre los trabajadores rurales y los chacareros en la provincia de Tucumán. Lo interesante de la obra es la manera en cómo se muestra el padecimiento que experimentan los obreros, el cual se traduce en un deterioro de sus cuerpos y la poca capacidad de acción que poseen los mismos. No obstante, se destaca el rol de las mujeres, quienes son las verdaderas protagonistas de los pequeños cambios que se dan.
He disfrutado la obra por tercera vez y lamento que no continúe, sobre todo en un momento en que se necesitan estas voces para poder pensar pero también accionar.
25/11/2018 19:24 Luciana 2 Excelentes actuaciones, una pequeña gran obra, centrada en lo humano.
18/11/2017 13:09 Ana Excelente! Super recomendable!!
08/11/2017 15:26 Guillermo B Alucinante trabajo!! La puesta, la perspectiva del espectador, el tratamiento del acento de otras provincias, las actuaciones (son todxs buenxs!!), el tratamiento de un tema fuerte, muy fuerte para la historia argentina. Fui sin saber lo que iba a ver. Me llevé una sorpresa gratísima, más allá de que los sentimientos que surgen de la obra te dejen tan shockeado. La recomiendo totalmente.
06/11/2017 11:50 Aurea Muy buena en todo sentido: guión, puesta, actuaciones. La recomiendo mucho.
01/11/2017 20:59 Alejo 3 Los subalternos representa una trama de la opresión; relaciones fundadas en las prácticas devoradoras del capitalismo, que no deja de asfixiar hasta matar. El ejemplo de esa barbarie puesto en escena reúne la esencia de los vínculos establecidos según el mandato del terrateniente, del patrón de estancia y del que hoy ya tiene rango de Ministerio (y esto no es teatro). El explotado también es explotado por otro y su multiplicidad excede hasta los caminos de la imaginación. La ignominia que sufren los de abajo coagula y repite la putrefacción que fija la reinante forma de producción. El hombre descamisado también castiga a la mujer bajo la chapa perforada y esa mujer ejerce esa misma violencia con otra mujer. Pero no todos deben ser medidos con la misma vara. Hay quienes luchan por un pedazo de pan y otros por no perder ganancia manchada de sangre. Los títulos de nuestra nefasta época encuentran en Los subalternos una filosa versión dramatúrgica, una dirección que se ajusta a un registro sencillo -como cualidad de arte- (no hay espuma poética desbordada) y actuaciones que fundamentan las razones de una obra para ir a ver.