09/02/2025 12:07por Mariangeles S 67 Una puesta intensa, con un muy buen trabajo actoral, que impone el si, lencio en la platea, y un seguimiento expectante, ante un final que se construye desde la primera imagen en escena, duplicada en la seudo pantalla, que nos remite a una filmaciòn de la relaciòn que vemos en el escenario. La mùsica, no solo acompaña, suma. Los mensajes en el mòvil, son la forma que la tecnologìa nos ofrece para eludir a las relaciones que no deseamos, sin enfrentar la mirada del otro. Un drama romàntico, con todos sus procedimientos, pero cuyo sentido es decirnos que el amor, la posesiòn, las parejas tòxicas, y la objetivaciòn de un otro, no pertenecen a ningùn gènero, sino que se dan entre personas, al igual que el amor, o el desamor. Una obra para ver y reflexionar, con fuertes encuentros personales, que desde la direcciòn se resuelven con eficacia.
01/12/2024 10:43por Mariangeles S 67 Las actrices van en crescendo en la tensión de su encuentro, entre la palabra de una y el silencio de la otra, que ríe y se sorprende, y vuelve a su postura inicial, sin problemas. Muy buenas las actuaciones, que trasladan al cuerpo, la energía necesaria para dar cuenta de los convulsionados sentimientos, de envidia y deseo, de furia y miedo que se desatan en la escena.
18/11/2024 09:43por Mariangeles S 67 Ánima Joyce es una puesta con un movimiento de puesta impresionante, la formación de imágenes congeladas, los coros, los desplazamientos en masa, responden a los procedimientos de un grotesco impactante, como las máscaras desde el maquillaje, y un clima expresionista creado a través de la neblina dublinense, y la música. Las actuaciones son de excelencia, y el ritmo, el tempo, no cede, no deja un espacio al vacío, sosteniendo la expectación de una obra, que para los gustos en curso, es un poco larga en duración. Pero atrapa en los diversos puntos de vista que el dramaturgo expuso, haciendo vértice en la figura de Lucía, la hija del escritor, y su relación, con la ciencia, Jung, y con ese padre que desplaza cualquier otro sentimiento en su vida. Una puesta inquietante.
28/10/2024 08:12por Mariangeles S 67 Una pieza interesante en lo que propone, dinámica en su puesta, muy bien actuada, personajes reconocibles en el mundillo teatral en una época donde el teatro comercial funcionaba con el concepto de las divas y divos en la escena, el famoso star system, divertida, y atrevida con un texto clásico de nuestra teatralidad. Muy buen teatro.
26/10/2024 09:51por Mariangeles S 67 Ayer asistí a una muy bizarra parodia de la personalidad de Calígula, y su locura, en una metáfora lograda sobre nuestra realidad presente. Calígula a lo largo de la historia ha tomado varios cuerpos, diferentes rostros, pero con un mismo deseo el ejercicio del poder de forma arbitraria y cruel, como un demiurgo que quiere ser Dios y cometer contra los hombres su destino, la certeza de que la vida humana es mortal, como diría Camus. En su desenfreno está la búsqueda de un sentido perdido ante la muerte implacable. La Compañía El Vacío Fértil, pone en acto la figura de un soberano que no tiene límites, como el histórico, amante de su hermana, y de su perro, aquel lo era de su caballo devenido senador, y lo hace con muy buenas actuaciones, que van construyendo su subjetividad, y la propia a medida que las acciones se desarrollan. La ruptura de la cuarta pared, interactuar con un espectador no siempre ingenuo, le da a la puesta un presente del enunciado, que es el presente de un contexto, que nos tiene a todos en las manos de una mente deseante de lo imposible.
19/10/2024 09:56por Mariangeles S 67 La puesta es un trabajo excelente, que nos golpea como ese timbre que la protagonista espera sin respuesta, y su historia contada con maestría, es una novela atrapante y dolorosa.
14/10/2024 11:03por Mariangeles S 67 Muy buenas actuaciones, con momentos de alta intensidad en una puesta de un texto complejo, que sin embargo, nos atrapa en los sonidos poéticos de sus palabras, en la muy buena dicción de Ariel Ragusa, que nos invita a seguirlo, tras los pasos de su Ana, Gabriela Capurro, que se mueve en escena, con naturalidad, como si levitara. El dueto final entre Waldo y Julia, Florencia Bartolacci tiene la fuerza de una actuación que comprende a sus personajes. Todos mantienen una tensión constante entre la escena y el espectador de la mano de la muy buena dirección de Sandro Mlynkiewicz, la iluminación y el sonido construyen el clima necesario, el contexto para las acciones que componen la trama.