18/05/2023 20:12por Marisa C 7 Un clima muy bien logrado. La sutileza de la actriz Maia Lancioni para representar a esa tarántula, como va tejiendo su tela. El padre verborrágico, perverso, autoritario pero acorralado que compone Walter Muni, al que no conocía en su rol de actor, es excelente. Gonzalo Pedalino se luce en la simpleza del personaje, bruto, dominado...Un balance perfecto. La puesta de Aprile, para mi, la mejor que le vi hasta el momento: la escenografía de Ana Díaz Taibo, la música original de Florencia Albarrazín. Y del texto de Patricia Suárez que decir que no se haya dicho...Excelente. Larga vida a La Tarántula!
16/04/2023 17:37por Marisa C 7 La obra es densa, pesimista. Como sus personajes que nadan en la desesperanza, asfixiados en el subsuelo. Tal vez la única esperanza sean esos niños que juegan en el afuera que tanto miedo les da a los de adentro. O en quien logre dejar el círculo infinito de la desgracia y enfrentarse a su destino.
Para mi eso es el teatro como espectadora: poder sentir la misma atmosfera que los personajes.
La Petraglia y Paccini, chapeau. Todos buenos actores.
Visualmente tiene instantáneas que parecen un Caravaggio.
Muy merecidas las nominaciones y los premios.
07/11/2022 13:06por Marisa C 7 Un clásico de Tito Cossa que mantiene actualidad. El universo de la familia. La madre (patria) que abunda en tierras que sin embargo no comparte con sus hijos. Es mala? Prefiere que se ganen solos su pan? Es conservadora? En todo caso lo único que quiere es que sus hijos estén unidos, por el amor o por el espanto. Y calladitos, porque sino...mamporro y no hay que llorar. Hay que verla para saber más.
Buenas actuaciones, buena ambientación, buena dirección. Hay un grupo, se nota y se agradece. Recomiendo! Y si, Viviana Manusia conmueve!
18/07/2022 19:41por Marisa C 7 Nosotros sentimos la obra como en dos actos definidos: uno prepandemia, experimental en cuanto a la creación, lo opresivo. Nos trasmitió toda la densidad de aquellos tiempos. Cierto es el humor cínico y crítico de una sociedad cargada de egoísmo. Luego se vuelve una fiesta, el festival, el salir afuera. Y esa sensación de que no cambió nada...que seguimos comportándonos como si nada hubiera pasado. Muy divertida, las actrices lo dan todo, se divierten ellas y los espectadores de parabienes. También tiene algo de poética que se cuela en momentos audiovisuales. Un gran trabajo conjunto.
23/04/2022 10:04por Marisa C 7 El teatro sería un desierto sin el cuerpo del actor, torturado por el texto, la dirección, la luz, el sonido, la crítica, un infinito de jefes…en definitiva puede carecer de palabras, de desarrollo, de nudo y de final. Pero sin el actor y sin el espectador, es absolutamente nada. Felicitaciones por la energía, por la belleza.
05/08/2019 09:59por Marisa C 7 El que mira las estrellas observa el pasado con la mirada del presente, un pasado que el tiempo y la distancia logran perdonar. Por eso a Damián no le entra la maldad.
Un escritor crea un personaje heterónimo llenándolo de recuerdos, un actor recrea ese personaje aportándole sus propios recuerdos y cada espectador descubre la similitud con los suyos. Así se arma este espectáculo con recortes, objetos, sensaciones…todas cosas que hacen bien al corazón. No hay gritos ni conflictos, hay hermosas canciones, voces armoniosas, actuación conmovedora. Hay ganas de que las estrellas nos miren. Recomiendo!
31/03/2018 15:52por Marisa C 7 La Terquedad de un hombre, empecinado en encontrar un punto de unión entre los idiomas, que ayude a desterrar los desencuentros entre los seres humanos. Guerras y divisiones se desencadenan por no entendernos, por hablar diferente. Ese factor común lo encuentra en una lógica numérica y exacta, propia del "buen fascista", pero no alcanza a ver sino al final que las diferencias están en las palabras y en el significado subjetivo a cada lengua... a los angloparlantes no parece importarles si un pescado está vivo o muerto, mientras que para los hispanohablantes es cuestión de vida o muerte saberlo. En todo caso La Terquedad es una obra de teatro impresionante, surgida de la genialidad de un autor terco también, empecinado por la perfección del lenguaje y apalancado de manera soberbia en una escenografía 360 en el marco histórico (por momentos con ciertas licencias) de la Guerra Civil Española. Una gran noche en el Cervantes, junto con amigos apasionados por el teatro.