03/11/2008 16:54por Natalia F 56 Una o muchas historias, una mirada y todas, un lugar que es todos los lugares; un hecho que nunca es uno ni es común. Actuaciones destacables. Impecables presencias y sugeridas despresencias en escena. Una dramaturgia complicada que se logra original. Una obra que desborda de energia y que nos espeja con ese creer egoista de que hay otro que quiere escuchar cuando en realidad cada uno solo necesita decir. Arbitrariedades de la naturaleza, aunque, algo haya quiza sobre aquello de que todos tenemos algo de jovenes, mucho de idiotas y con certeza un corazon.
Buena eleccion, y sin duda, buen teatro.
14/09/2008 14:49por Natalia F 56 De haber durado, 2, 3, 4 horas más, feliz me hubiera quedado. Un teatro que dice, para un publico que ansioso quiere escuchar,un inmenso trabajo-logrado al extremo- de dirección, de actuación, de dramaturgia, de puesta. Un colectivo, ejemplar, que renueva la teatralidad en su máxima calidad, recupera un mensaje que adapta con majestuosidad y nos recuerda la decadencia que en estos dias transitamos como sociedad, a la vez que nos muestra como la historia se repite, como los humanos nos repetimos, cuanto vemos y cuanto mas elegimos no ver .Una obra politica, en el mas sano y amplio significado de este maravilloso término.Un compromiso con el teatro, ese teatro que no esta despojado del lugar en el mundo donde funciona, un elenco imposible por lo rigurosamente bueno y un publico militante de obras con esta grandeza. Por mas Hijos del Sol.
16/08/2008 23:20por Natalia F 56 La sapiencia única de Beckett desplegada en un escenario tan perfecto como devastado, alli su originalidad.La percepción del vacio y la tensión del sinsentido ejecutadas desde el registro exacto y en paridad absoluta en terminos de excelencia y majestuosidad en la actuación. Dos gigantes que en cada gesto exudan teatro. Aún sabiendo que la obra tiene un final, el deseo mas fuerte, es que no termine.Saludo tamaña calidad de pieza.
16/08/2008 23:19por Natalia F 56 La sapiencia única de Beckett desplegada en un escenario tan perfecto como devastado, alli su originalidad.La percepción del vacio y la tensión del sinsentido ejecutadas desde el registro exacto y en paridad absoluta en terminos de excelencia y majestuosidad en la actuación. Dos gigantes que en cada gesto exhudan teatro. Aún sabiendo que la obra tiene un final, el deseo mas fuerte, es que no termine.Saludo tamaña calidad de pieza.
02/08/2008 12:57por Natalia F 56 Un rato de un pueblo, una historia, amores y desamores, esperas e intrigas, un tren que no pasa más, un padre que es uno o el de ellos, un amor que viene y se va, lo es todo y es nada; ¿es amor? Blanca Grande vive en ese escenario, ese escenario es, Blanca Grande. Su música es contagiosa a la vez que acompañadora del relato que me transportó a todos los pueblos que visité, a todos los secretos que presencié, a todas las promesas con las que soñé, a los olores, los árboles…La soledad no es una elección, pero a veces, tampoco se está sólo en ella. Las historias simples, siempre llevan a pensar complejo, allí su magia. Véanla, es una obra Blanca y es Grande.
23/06/2008 10:26por Natalia F 56 Desde donde se observa es quien se es o quien se quisiera ser en escena. Multiplicidad de insinuaciones de deseos y frustraciones intensas. Una historia, que con la fuerza de la palabra, de la imaginación y las bellas melodías, se revela en relación a un presente y un pasado que como casi todo en la vida, hay que construir. La mirada ajena que es a la vez la propia y la de otros, una mirada que termina siendo la nuestra. Un desafío que tensiona identidades desde la penumbra. Sabias elecciones musicales y la sensación, que se agradece, de mucho trabajo, el de ellos y el que nos transfieren a los espectadores. Lo que se dice, lo que se calla y lo que se actúa. Agua quieta, corre profunda...
08/06/2008 21:38por Natalia F 56 Los Sensuales es una obra ecléctica, épica y sublime; en todas sus partes: la puesta, la música, los actores, y la sabiduría y belleza extrema de la dramaturgia. Es una obra Renacentista en toda su perspectiva, una suerte de revolución en el teatro nuestro de cada día. Un espacio pleno, ideal. Todo lo tiene y todo lo muestra; es una obra poco egoísta, todo el talento que despliega esta ahí, para nosotros, los espectadores.Una mirada del mundo, de los seres humanos, del amor, del desamor, de los deseos, de Dios o de un padre, de la danza, de la música, de las palabras, de la verdad, de la mentira. Desopilantemente original, merecedora de admiración y respeto. Arte superador.Felicitaciones a todas las particulas que han compuesto esta Obra. Este lado del mundo agradece, enorme agradecimiento , materiales como este.