20/07/2018 14:50por Gustavo M 41 Es una obra que incomoda, que lastima, que nos interpela como espectadores. Se trabaja con el sentido común sobre los marginados , los excluidos, los condenados de esta tierra y la buena conciencia de los sectores medios que quieren modificar realidades sin sacarse sus pantuflas pero llenos de buenas intenciones y hasta se copan en regalar una pelota para hacer a un joven feliz aunque sea por un instante como la selfie que luego se sacan con él.
En varios momentos me reí con estos desangelados que por supuesto no me gustaría cruzar en una esquina a a la noche. Y me cuestioné por hacerlo , me molestó las risas de los espectadores. Me acordé que el lunes estaba disfrutando de El Marginal 2 en mi Smart y dije vemos esto como teatro todos los días y lo naturalizamos y no hacemos nada para que cambie porque simplemente aceptamos esta realidad que nos duele.
Me acordé después de ver la obra algo que me dijeron mis alumnos del CUD en la cárcel de Devoto hace algunos años que quieren los sociólogos de nosotros : Ya saben como cogemos , como comemos , como dormimos que más quieren saber de nosotros. ¿ Cual es su morbo?
En términos estructurales la obra por momentos cae en estereotipos, en sentidos comunes, en baches , en mensajes y en el exceso de no reconocer que más es menos.
Es la segunda obra que veo de Ajaka y de nuevo aparece lo circense, la desmesura, pero también fragmentos de la vida misma. Se sabe que el final no va a ser bueno y menos en ese barrio donde se consume paco, donde hay muertos vivos, donde muere el más bueno y nace al toque un pibe con una esperanza tan pequeña como él. Y sin embargo hay poesía que rompe con lógicas que escapa, que se escribe en una pared, que la ve tal vez la más discapacitada pero que entiende la magia de sobrevivir a pesar de todo.
Ajaka en un reportaje dijo que en sus comienzos cen teatro sabía muy bien como ubicar a ocho espectadores e n una sala y hacer creer que son mucho más. Eso con el tiempo como director lo sigue logrando con actores y actrices los hace multiplicar en miles de rostros que no conocemos pero presentimos y nos da un espejo roto en el que nos podemos reconocer.
01/07/2018 01:24por Gustavo M 41 Me gustó mucho la obra. Aguante el teatro independiente. Hoy para mi era un día triste y no estoy hablando de fútbol solamente, sino de nosotros , de país y en un momento reí.
Me parecio extraño hacerlo porque fui con la idea burguesa "a ver que me vas a contar" y me encontré con teatro, con actores que contaban una historia de perdedores , de fiestas que nadie ya quiere festejar , del éxito que es un fracaso seguro, de una heladera vacía que no cierra, de hijos que no tienen la culpa de vivir.
Y me acordé de Ure cuando hablaba del dolor y decía que no alcanza con una curita pulcra para solucionarlo y que en las fiestas su familia se desangraba en peleas y sin embargo se amaban. Yo les creí y no estoy hablando de veracidad , estoy hablando de vida, de sueños rotos, de personas de carne y hueso que a su manera y sobreviven como ustedes lo hacen actuando.
24/04/2018 00:03por Gustavo M 41 Si de algo no quedan dudas es que la obra fue escrita por Casas y ahí reside un problema no menor, está y aparece el escritor constantemente que a todo esto como guionista y dramaturgo como en un viejo chiste es un buen escritor. ¿Alcanza para hacer una buena obra decir cosas inteligentes? Creo que no y no es casualidad que aparezca en la obra dos veces la palabra slogan .
La reiteración como recurso , como metáfora de lo cíclico puede funcionar como un medio pero nunca como un fin en si mismo para las acciones y los diálogos.
Hay una idea de una inteligencia canchera de entre nos para entendidos un lunes y con música de Peter Franton , no es menor que el final sea un tributo trucho o sea un cover cantado por una morocha.
Las actuaciones son buenas y se destacan María Soldi y Pablo Silven. En definitiva ellos no tienen la culpa de que la cosa pase porque no haya acción y el conflicto dependa de si Luis Ernesto llega vivo.
14/04/2018 16:05por Gustavo M 41 La obra tiene la marca de teatro y cine muy argento de los 80 con diálogos de sentidos comunes que nos hacen acordar a lo peor y mejor de nosotros en esto de ser sociedad, de ser familia, de una época con su música, sus practicas y sus modas.
Parece que en las películas está la ilusión de lo que queremos ser, por más que sean alquiladas. Es en ellas donde se logra placer y la idea de lo que deseamos.
Las actuaciones y los caracteres de los personajes estan muy bien trabajados. Nos hacen reír por más que sea un drama lo que están diciendo y viviendo. Hay algo de Macocos y de Gambas al Ajillo en esas risas.
Logran veracidad en esto de hacernos pensar en la ingenuidad de esa época e insisto nos hacen reir de nosotros mismos en esta época de Macri y eso no es poco.
Para mi gusto hay un exceso con el tiempo de duración que hace que caiga en lo previsible, en reiteraciones , en baches y en abuso de recurso de prende y apaga la luz. Pero de última a quién le importa eso si nos conmovemos con recuperar esos días de vida cuando creíamos que estaban muertos.
20/03/2018 12:39por Gustavo M 41 La puesta es buena y original. y eso que me hace acordar a ese teatro norteamericano de los años 60 y 70. Hay que hacer teatro un día lunes y ellos lo hacen en un lugar emblemático como el Teatro del Pueblo con mucha dignidad. En términos estructurales hay desniveles en la actuación, hay baches en el texto y por momentos se parece a un gran ejercicio de teatro.
Hay mucho para trabajar , para crecer y para complejizar sobre todo en épocas como la actual en donde hay muchos Mark que no necesitan de la voz de John para salir a matar.
18/03/2018 22:36por Gustavo M 41 eComienzo diciendo que Irina es una artista enorme con todo lo que eso implica, es decir supera por lejos la idea de ser una actriz. En esta obra logra intimidad y lo destaco porque lo hace en una sala difícil , en la cual se escuchan ruidos y voces provenientes del exterior y a esto hay que sumar la distribución de los espectadores. Hay matices en su voz que trabaja con tanta delicadeza que le da detalles a los caracteres de un personaje desesperado y como todos sabemos o no ahí reside la belleza. Pero vayamos a lo malo, para mi gusto no alcanza con contarnos algo, no alcanza con la palabra.Falta acción y eso se nota mucho se nota por más que a lo último se escuche a Janis cantando aquella vieja canción
03/12/2017 16:04por Gustavo M 41 La obra se inscribe dentro de la lógica del mundo Drut. He visto, contando esta, siete obras del director y puedo asegurar que su sello, su estilo , su mirada está presente.
La didascalia es explicita, las actuaciones crecen y no dejan de crecer a lo largo de la obra, los soliloquios sirven para profundizar los caracteres.Y lo extraño, lo retro y lo poético confluyen en una puesta única. Un tema sumamente complejo como dar vida visto desde distintas posiciones que por suerte son demasiada humanas y por eso duelen.
Hay fragmentos del texto que son brillantes y quizás ahí resida la desesperación por guardarlos ya que se escabullen de nuestra memoria como de la vida misma de cada uno de los personajes.
Un aspecto a considerar es el público , actores, gente linda y pulcra que se sienten cómodos con la obra y los otros que se duermen, que se quejan , que no entienden, que se aburren. Esa mezcla sin lugar a dudas es lo más interesante de Drut.