La obra cuenta los acontecimientos ocurridos durante las invasiones inglesas al puerto de Buenos Aires, a través de los diversos relatos de los personajes que protagonizan la historia (el Pueblo, Lord Beresford, el virrey Sobremonte y los militares españoles). Los episodios son unidos por canciones con distintos ritmos del país.
El texto y la puesta se alejan definitivamente de la narración tradicional de los libros, y así muestran a quienes estuvieron al frente de estos hechos en su lado más humano y sensible. En 1806, las invasiones inglesas fueron mucho más que una batalla militar entre las tropas de la Corona Británica y los habitantes de Buenos Aires. Fueron, además, el germen de la Revolución de Mayo, del grito de libertad y de emancipación.
El pueblo argentino comenzó a sentir que podía ser dueño de su futuro y que podía decidir por sí mismo qué era lo más conveniente. ?Las invasiones inglesas sirvieron a los criollos para fortalecer su autoestima, para ser protagonistas de la independencia?, sostuvo José Pablo Feinmann en su ensayo "La sangre derramada".
Ese paso delante de un pueblo decidido a no soportar una invasión del exterior, a no admitir unas forma de gobierno, una cultura y un comercio que no era decidido por la voluntad popular, a reclamar gobernantes que escuchen lo que la gente quiere y respetuosos del mandato de la sociedad, derivó, pocos años después, en la creación de un estado independiente, libre y soberano.
- 13/08/2010 - El Celcit - Por: Edith Scher